En la
fe existe sentimientos y emociones, ella es la más pura creencia de lo que se
espera. Pero, en el día a día, en la batalla para llegar al blanco, lo que
faltan son palabras negativas, muchas veces venidas de los hijos, y hasta mismo
de otras personas, como también la visión de una aparente empeora de
comportamiento aun después de estar orando en ese propósito.
Sin
hablar en las situaciones constantes que intentan hacerle hablar palabras
indebidas, contrarias a lo que cree y pide en oración. Por esa razón, queridas
mamás, en el camino de la fe combatiendo los males, tenemos que ser sordas,
ciegas y mudas.
¿Alguien
habló algo contrario a su fe?
¡No oiga!
¿Lo que usted ve es diferente de lo que espera?
¡No vea!
¿Las provocaciones quieren usar su boca para hablar lo que no debe?
¡Mantenga la boca
cerrada!
SORDA, CIEGA Y MUDA... ¡para
el mal!
Solo así, sus oídos
escucharán la voz de la fe, sus ojos verán con la visión de la fe,
su boca
anunciará las buenas nuevas de fe.
Orar y obedecer la palabra
de Dios es la prueba de la verdadera fe.
Quien así cree, ve la gloria
de Dios en su vida.
¡Orando siempre!
Isis Regina
2 comentarios:
me parece muy apropiado el articulo, lo dificil es aplicarlo.
pero analisando cada una de las sugerebcias, podemos ver, que al llevarlas a la practica, estas nos mantienen, blindadas. evitamos contaminarnos.
Muy cierto solo asi podremos guardar nuestro corazon
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